¿Crees que podrías beneficiarte de un buen estudio de mercado, pero no sabes por dónde atacarlo? Estos ejemplos prácticos te aclararán las cosas.
¿Crees que podrías beneficiarte de un buen estudio de mercado, pero no sabes por dónde empezar? En primer lugar, vamos a ver qué es un estudio de mercado, y cómo hacerlo. Además, veremos una serie de ejemplos prácticos que te aclararán el camino a la hora de emprender.
Estos son los ejemplos que explicaremos:
Veamos todo sobre los estudios de mercado en esta completa guía con ejemplos prácticos.
Un estudio de mercado es la investigación de un determinado sector, para poder definir estrategias efectivas de marketing, productos o servicios. Se trata de una herramienta fundamental para incluir en un plan de negocio sólido.
Los estudios de mercado se pueden clasificar con base en diferentes criterios. Por un lado, en cuanto a metodología, los hay de dos tipos. Los de tipo cualitativos se enfocan en comprender de manera profunda las opiniones y experiencias del consumidor. En cambio, el estudio de mercado cuantitativo pone énfasis en los datos numéricos.
También se puede investigar el mercado con datos directos de las fuentes o aprovechando información ya publicada por terceros. Así, distinguimos entre los estudios de mercado primarios, basados en encuestas y entrevistas, y los secundarios, que utilizan informes, bases de datos y censos.

La función principal de hacer un estudio de mercado es conocer la oferta y la demanda dentro de un sector, para poder analizar la viabilidad al desarrollar una idea de negocio y saber si se puede competir con éxito.
Estas son las funciones que puede tener el estudio de mercado:
En resumen, el estudio de mercado te da una visión clara que te permite tomar mejores decisiones estratégicas.
Analizar el mercado antes de proceder a lanzar una empresa, producto o servicio, es clave para reducir riesgos y aumentar las opciones de éxito. Además, con esta información clave, las empresas pueden optimizar mejor sus recursos e identificar oportunidades.
Si emprendes y sabes que tu sector ya ofrece lo que tú vas a ofertar, un estudio de este tipo te ayudará a saber cómo surgir en un mercado saturado.
En definitiva, es un instrumento eficaz para la toma de decisiones empresarial, sobre todo en sus inicios o al afrontar cambios o ampliaciones.
En general, un estudio de mercado suele contar con una serie de elementos:
Es importante recordar que el mercado evoluciona constantemente, por eso lo idóneo es realizar este tipo de estudios de manera periódica.
Lo primero de todo para realizar una investigación de mercado es definir los objetivos de la misma. Después, se deben determinar las fuentes de información que se van a emplear, por ejemplo encuestas, reportes de terceros, etc. Se deberán recopilar datos y analizarlos, para finalmente integrar todo en un informe final.
En él, deberá quedar claro quién es el target de la empresa o cliente ideal, quién es la competencia y qué ofrece, cuál es la demanda de dicho target y en qué puede ofrecer la empresa un valor diferencial.
Abordaremos varios ejemplos diferentes con los que cubrir algunas de las principales necesidades actuales. Veremos casos de productos tangibles e intangibles, y aplicados a diferentes sectores.
Imaginemos que alguien que quiere emprender elige el campo de la industria alimentaria eco y sostenible. No se trata de una elección arbitraria, ya que es una persona vegetariana, preocupada por la calidad de los alimentos de su día a día. Así que la empresa irá ligada a sus propias inquietudes.
Un dato interesante es que las empresas que más triunfan son aquellas ligadas a una preocupación o necesidad de su propio creador.
Pero, no hay que olvidar que la industria eco y sostenible es una de las más pujantes en este momento. Por eso, es un ejemplo ideal para poder ver cómo funciona un plan de mercado en este caso:

Para nuestro segundo ejemplo nos centraremos en un servicio digital, que tus clientes van a poder probar antes de comprar. No vamos a partir de un caso en el que sepamos el mercado que queremos abordar, sino que vamos a usar un estudio de mercado para analizar la viabilidad de un servicio que esté perfectamente definido.
Ese servicio será una subscripción a un editor de texto Markdown en formato app. Está claro que cada vez hay más gente que pasa de los editores de texto ultra complejos a la simpleza del Markdown. Y a su vez, están abrazando el formato de subscripción por uso. Pero ¿cómo saber si nuestro servicio puede triunfar en este mercado en alza? Veámoslo con el siguiente estudio de mercado:
En este caso vamos a ver un ejemplo aplicado al sector de los bienes raíces. En concreto, la idea es analizar un proyecto de viviendas sostenibles en una ciudad hipotética llamada Ecópolis.
Para ello, estos son los pasos que podrías seguir:
Ahora imagina que has creado una app para que los niños aprendan a programar. Sin embargo, no tienes claro si funcionará, si tiene demanda, a qué padres dirigirte, etc.

Para ello, podrías trabajar en esta línea:
En este caso, analizaremos un ejemplo aplicado al sector del software como servicio (SaaS). La idea es evaluar la viabilidad de un nuevo software de gestión de proyectos dirigido a pequeñas y medianas empresas (pymes) en una ciudad ficticia llamada Innovapolis.
Para ello, estos son los pasos que podrías seguir:
Esperamos que te haya servido de ayuda todo lo anterior y que te sea mucho más fácil elaborar tu propio estudio de mercado.