¿Qué es una factura intracomunitaria? ¿Cómo se realiza una y qué elementos debe reunir? Descubre ejemplos de facturas intracomunitarias y aprende a hacerlas.
Hoy en día, prácticamente cualquier persona puede iniciar un negocio internacional. Tan solo se necesita un ordenador, conexión a internet... y una buena idea. Sin embargo, el tema de la normativa legal y la facturación es otra historia.
Para facilitar un poco las relaciones comerciales entre los países europeos, la Unión Europa creó la factura intracomunitaria. Este tipo de facturas se aplican a las operaciones intracomunitarias, es decir, las compras o ventas entre empresas de países pertenecientes a la UE.
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Una factura intracomunitaria es un documento mercantil que refleja la información de compraventa de una operación comercial de empresas de la Unión Europea. Estas operaciones reciben el hombre de entregas intracomunitarias y están sometidas a un régimen especial de tributación en el que se aplica el IVA intracomunitario.
Si tienes tu propio negocio, seguro que te ha tocado hacer más de una factura. Esa experiencia es muy valiosa a la hora de realizar una factura intracomunitaria, ya que el proceso es prácticamente el mismo. La única diferencia es que el emisor tiene que estar inscrito en el Registro de Operadores Intracomunitarios, más conocido como ROI.
El ROI es un censo de profesionales y empresarios que realizan operaciones comerciales con profesionales o empresas de otro país miembro de la UE. El registro es gratuito y no conlleva más obligación que presentar el modelo 349 (de manera mensual, bimestral, trimestral o anual, dependiendo del volumen de las operaciones), una declaración informativa en la que se incluyen las operaciones intracomunitarias realizadas.
No obstante, si estamos un tiempo sin emitir este modelo, Hacienda puede iniciar un proceso discrecional para dar de baja a la empresa o el autónomo en el ROI.
Pero volvamos a las facturas. Una vez estemos dados de alta en el ROI y consigamos el número VAT (Valued Added Tax) o NIF-IVA, para emitir cualquier ejemplo de factura intracomunitaria hay que incluir los siguientes conceptos:
Es importante tener en cuenta que uno de los requisitos para emitir facturas intracomunitarias es el número VAT, que debe quedar reflejado en el documento. En cuanto a la numeración, se puede optar por una serie diferente para diferenciar las operaciones nacionales de las intracomunitarias.
Para emitir este tipo de facturas a proveedores y clientes de la UE, lo más fácil es utilizar un programa de gestión y facturación, como el que ofrece Holded. De esta forma, nos aseguraremos de llevar un control y de que no se nos escape ningún dato importante.

El IVA tiene una regulación especial en las facturas intracomunitarias. En pocas palabras, si la operación se realiza entre empresas de países miembros de la UE registradas en el ROI, la factura intracomunitaria no lleva IVA; si la venta se realiza a un consumidor final, se aplica IVA aunque viva en otro país.
Es decir, que si tanto la empresa emisora como la empresa destinataria tienen NIF-IVA, la operación está exenta de IVA y no se aplica en la factura (por ejemplo, en el caso de una factura intracomunitaria de un traductor español autónomo a una empresa francesa). Si uno de los operadores no tiene NIF-IVA, se aplica el IVA del país de emisión.
El número VAT, NIF-IVA o NIF intracomunitario es un número fiscal necesario para formalizar una operación intracomunitaria. Está compuesto por dos letras (que son las mismas para todos los operadores de un mismo país) y el número fiscal de la empresa o profesional. Por ejemplo, una empresa española con el NIF A90000000, tendrá el NIF-IVA ESA90000000.
El NIF-IVA es necesario para hacer facturas intracomunitarias. Estas facturas se declaran mediante el modelo informativo 349, incluyendo la denominación social, el volumen y el tipo de operación y los datos del receptor, si corresponden.
¿Pero cómo se obtiene el NIF-IVA? Para poder utilizarlo, se debe solicitar a la Agencia Tributaria presentando el modelo 036 y rellenando las casillas 582 y 584. Si Hacienda acepta la solicitud, la empresa pasará a formar parte del ROI.
Además, todas las empresas, profesionales o autónomos que tienen expedido un NIF-IVA o VAT pasan a estar incluidos en el VIES, es decir, el Sistema de Intercambio de Información sobre el IVA.
El IVA intracomunitario es el IVA aplicable en las transacciones comerciales entre países de la UE. Las leyes del IVA difieren de un país a otro y, a la hora de establecer relaciones internacionales, la tributación podría llegar a ser un caos.
Para facilitar las relaciones intracomunitarias, la UE aprobó una norma especial para todas las transacciones comerciales entre empresas de los países miembros. No obstante, la aplicación de esta norma depende del tipo de venta o compra.
¿Qué pasa con el IRPF en las facturas intracomunitarias? ¿Hay que aplicar la retención del IRPF en estas facturas? En las operaciones intracomunitarias no se aplica el IRPF. ¿Por qué? Pues porque es un impuesto que se liquida a través del modelo 111 y solo es aplicable a empresarios y profesionales españoles. Por ejemplo, si le hacemos una factura intracomunitaria a un cliente de Francia y aplicamos la retención, estaríamos perdiendo el dinero, porque no lo va a ingresar en Hacienda a nuestro nombre.
Como ya hemos visto, el número VAT, el NIF-IVA o IVA intracomunitario es el número de identificación fiscal necesario para hacer facturas intracomunitarias. Es el equivalente al NIF de una empresa a nivel nacional. De hecho, está formado por el código de dos letras del país y el propio NIF de la empresa.
Hay dos grandes grupos de operadores que están obligados a registrarse en el ROI para realizar operaciones intracomunitarias:1. Empresas y profesionales que venden productos o prestan servicios a otras empresas dentro de la UE.2. Empresas y autónomos que contraten servicios de otras empresas de la UE.